Tuve una experiencia mixta en este lugar. Por un lado, disfruté de unas pizzas deliciosas, finas como a la piedra, que llegaron en apenas 10 minutos gracias a la prontitud del servicio, probablemente favorecida por la temprana hora y la falta de afluencia. El ambiente era agradable, limpio y atractivo, en marcado contraste con el Kentucky de la calle Godoy Cruz en Palermo. Además, las promociones disponibles hacen que sea un lugar atractivo para reunirse con amigos. El mesero demostró ser muy atento, brindando un servicio que mejoró nuestra experiencia.
Sin embargo, no todo fue perfecto. Lamentablemente, la fainá estaba fría, lo cual fue una decepción notable. A pesar de los aspectos positivos, este detalle afectó negativamente la experiencia general. En general, el lugar ofrece aspectos destacados, pero la temperatura de ciertos platos podría ser un área de mejora.
* Punto extra de Negatividad: En el baño de Chicas no había Agua
Todo rico pero lo más destacable es la atención de la mesera Micaela. Excelente amabilidad.
Es una pizzería de cadena, pero los productos son muy buenos. Mis preferidas son las empanadas fritas de carne y la pizza, los stromboli dejan bastante que desear. La atención es cordial y rápida, y la comida sale con buena velocidad también. Los precios son medios.
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